Maltratos a reos cubano-americanos

Dania Virgen García
Cuba por Dentro

Desde las prisiones  Quivicán, en la provincia Mayabeque, y Kilo 9, provincia de Camagüey, informan los reos Norberto Muñoz Palomino y Ángel García Rivero, acerca de maltratos a tres presos cubano-americanos.

Según Norberto Muñoz Palomino, el reo cubano americano Hanói Góngora Arias, quien trabaja en la fábrica de PROVARI, de la prisión de Quivican, fue golpeado severamente el pasado día 29 de junio, cuando se quejó de un fuerte dolor de cabeza y pidió a un funcionario de orden interior que lo condujera a la enfermería. El guardia le respondió que hasta que no terminara su trabajo y  cumpliera la norma, no sería llevado al médico, y que si no la cumplía sería encerrado en celda de castigo. Afirma la fuente que en esta fábrica se fabrican las camas de aluminio que se venden en las tiendas recaudadoras de divisas (TRD).

También en la prisión de Quivicán el reo cubano-americano José Cordero Valladares, se encuentra desnutrido, y en pésimas condiciones. Pesa solo 47 kilos, pero le niegan la asistencia médica.

Por su parte, refiere Ángel García Rivero que en la prisión de Kilo 9, el reo Delvis Machado Guerrero, de 40 años de edad, natural de Camagüey y residente en Estados Unidos, al no aceptar ser repatriado,  le han negado todo tipo de beneficios penales que le corresponden, tales como la libertad condicional.

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