por Dania Virgen García
Cuba por Dentro (CPD)
El recluso Gerardo Vega Murphy informa acerca de varios casos de presos a los que les son negados por parte de los jefes de la prisión el derecho a la atención médica y la licencia extrapenal.
El recluso Lázaro Marquería Toledo, perdió una pierna, producto de una golpiza que le fue propinada por un guardia de la policía nacional, llamado Yoendris Sánchez Meredia, el 23 de enero del 2010. Sancionado a 7 años de prisión, no tiene silla de ruedas y le niegan la atención médica.
Frank Pupo Martínez, por reclamar el beneficio de la llamada telefónica, fue esposado, golpeado, arrastrado, y empujado por las escaleras de un primer piso. Se le fracturaron las costillas. Para caminar necesita de la ayuda de otros reos, por no tener muletas. Tampoco recibe atención médica.
Lázaro Figueroa Morgan, de 46 años de edad, se encontraba durmiendo en una litera de tres pisos (que son prohibidas en las prisiones) cuando sufrió una caída. Las lesiones le provocaron una hernia discal. Le han negado la operación y la atención medica que recibe desde hace siete años no es la correcta.
Yoandry Rafael Guillot González, de 20 años de edad, quien se encuentra operado en la cabeza producto a un golpe contundente que le fue propinado hace nueve meses le han negado la licencia extrapenal, aprobada por los médicos, a pesar que no puede convivir entre reclusos.
Al recluso Ricardo Cruzata Zayas, que padece de artritis crónica, nivel bajo de compresión e irritabilidad agresiva, retraso mental, epilepsia postraumática, gastrodeudenitis crónica, le niegan la extrapenal, aunque ha pasado por medicina legal, varias veces en los 7 años que lleva en prisión.
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