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Dania Virgen García
Cuba por Dentro
El recluso Rolando Castro Sánchez informó desde el destacamento 3 de la prisión Cerámica Roja, en Camagüey, que fue esposado y golpeado el jueves 15 de diciembre por quejarse de la pésima calidad de la comida.
Refiere Rolando Castro que a las 11 de la mañana, en el horario del almuerzo, el segundo jefe de unidad, el capitán Camejo, le preguntó que cómo estaba el almuerzo, y cuando le respondió que era “un sancocho, que los estaban matando de hambre, que estaban dándoles morcillas con gusanos”, el oficial lo esposó y lo condujo hacia una celda de castigo, donde pidió al jefe de grupo llamado Sardiña un palo. Estando dentro de la celda, esposado, el capitán lo golpeó con el palo.
Después de la golpiza, el recluso refiere que empezó a gritar consignas en contra del régimen castrista. Al rato fue sacado de la celda y llevado a su compañía. Cuando exigió un certificado de lesiones, la doctora le comunicó que no podía dárselo porque “se metería en líos con el gobierno y perdería su título de médico”.
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